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martes, 13 de septiembre de 2011

La cara de esta mujer me es conocida


Por Tania Quintero, Lucerna

Desde que vi esta foto, me di cuenta que la tiraron en una calle cercana a mi casa, cuando vivía en Lawton, La Habana. Y sí, a esa señora la conocí del barrio. De las colas del pan, la bodega o la carnicería. Jaba en mano, coincidí también con ella en el agro, tal vez en la guarapera que había en 10 de Octubre y O'Farrill.

O esperando en el timbiriche, para comprar un par frituras de 'averigua' (de harina de castilla, sazonadas con cebollinos y sal). Quizá en el pasillo, al costado del Paradero, donde vendían tamales y durofrío hecho con jugos de fruta. Puede que nos hayamos tropezado cuando yo iba a alquilar libros y revistas, en una casa particular, en la calle Buenaventura.

O uno de esos días de mucho calor, cuando me gustaba entrar a la Iglesia de los Padres Pasionistas y desde un banco de madera contemplar los vitrales, resplandecientes por la luz del sol. Y escuchar los cientos de gorriones con desenfado piando, dentro y fuera del templo. De todos esos sitios la recuerdo.

Lo que sí, y debo confesarlo, no la recuerdo hurgando en latones de basura y contenedores, buscando latas de refrescos y cervezas y escachándolas, para venderlas por materia prima.

Ella, como tantas mujeres y hombres hoy en Cuba, tienen que tratar de ganarse unos pesos extras, porque lo que reciben de pensión no les alcanza. A lo mejor mi ex vecina, además de ganar con esos sacos cargados de latas escachadas en un carricoche improvisado, también vende periódicos, cigarros sueltos, jabitas de nailon, cucuruchos de maní y caramelos artesanales.

No sería la primera. Ni la última.
Foto: Juan A. Madrazo

3 comentarios:

  1. Muy doloroso, extremadamente doloroso, pero desgraciadamente esa es una realidad difícil de estirpar de la Cuba actual.

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  2. Microjet
    Ay Tania como ¨me ha llegado¨esa foto¨. Puede ser una vecina tuya, una mia o también, y muy frecuente, un paciente que se ha escapado de un centro psiquiátrico y que deambulam buscándose la vida como pueden en cualquier portal de La Habana.Es algo que se ve cada dia con más frecuencia en la Habana.

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  3. Microjet
    Acabo de leer un articulo de Iván muy real ¨con le bla, bla, bla no se come¨. Así se dicen las cosas. No pudiendo dejar el comentario en su blog pues no me sale la opción ¨escribir la frase CAPTCHA. Microjet
    Iván
    Muy buen comentario que encierra una gran verdad tan antigua como la historia del hombre. Primero hay que tener las necesidades vitales cubiertas y por supuesto que la primordial es la alimentación. Lo triste es que algunos están buscando protagonismo, nombre, dinero y alejados de los verdaderos problemas y tuiteando desde sus sofás.Ahora, copio y pego

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